Por María Angella Fortich Fraija
El Grupo Gubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) es el órgano internacional encargado de evaluar los conocimientos científicos que tengan que ver con la crisis climática actual y sus cambios. Todos los años hacen una conferencia y comunican los resultados de los análisis que hicieron teniendo en cuenta las fluctuaciones del medio ambiente con base a nuestro comportamiento ambiental.
Trayectoria del IPCC
En 1988, varias organizaciones científicas empezaron a evaluar periódicamente el cambio climático, los futuros riesgos de nuestro trato con la naturaleza, sus repercusiones, y todo esto teniendo en cuenta cómo podemos adaptarnos y atenuar los efectos del calentamiento global. Las evaluaciones que ellos elaboraron en el pasado y siguen elaborando en el presente son esenciales para la formulación de políticas relacionadas con el clima y para que los gobiernos tomen acción del daño climático en sus respectivos territorios.
Al ser un organismo gubernamental, su participación está abierta para todos los países que sean miembros de la OMM y la ONU; actualmente son 195 países. La mesa del IPCC, elegida por los gobiernos de los Estados miembros, facilita el proceso de orientación a los aspectos científicos, en las técnicas de su labor y la gestión de estrategias para mejorar la crisis actual.
Los informes del IPCC tienen un proceso largo y minucioso para poder garantizar el mejor resultado a los objetivos propuestos en las conferencias entre los miembros. Por lo tanto, se elaboran de manera abierta y transparente para que todos en cualquier momento podamos ver cómo llegaron a los resultados y a las hipótesis propuestas desde los puntos de vista de la comunidad científica.
Informe 2022
El documento que sacaron el pasado 4 de abril habla sobre la crisis climática y las soluciones para enfrentarla, se centran en los factores claves para alcanzar el objetivo de mantener el calentamiento global en 1,5 grados Celsius para el año 2050.
El nuevo informe es claro y contundente, si las emisiones globales de efecto invernadero no empiezan a disminuir sus emisiones para el 2025, será muy complicado evitar una catástrofe climática. La falta de decisiones y acciones por parte de los gobiernos mundiales para mitigarlo han sido casi nulas y actualmente el tiempo que tenemos para frenar la crisis es muy poco. No obstante, los planes climáticos de distintas naciones estiman seguir aumentando durante toda la década.
Según el informe, si no se llega a frenar a tiempo habrá graves consecuencias, se estima un calentamiento global del doble del que podemos enfrentar como civilización, sería de 3.2 grados Celsius para final del siglo. Esto se va a ver en las consecuencias devastadoras como los incendios forestales, huracanes, olas de calor, sequías, entre otras catástrofes naturales.
Esta es la tercera entrega que hace este organismo de control, está centrada en la mitigación del problema y en cómo podemos evitar el empeoramiento de esta crisis. Para sacar toda esta información se basaron en más de 18.000 artículos y/o publicaciones científicas para analizar el proceso y la forma de conseguir los objetivos climáticos.
El presidente del IPCC, Hoesung Lee, asegura que tenemos las herramientas y los conocimientos necesarios para limitar el calentamiento. Ellos estiman que el aumento de las temperaturas se estabilizará cuando las emisiones alcancen la neutralidad climática, lo que significa que necesitamos que la suma de los gases que se emitan y los que el planeta Tierra absorba sean cero. La cifra de 1,5 Celsius puede parecer como algo poco importante o fácil de lograr, pero so representa una gran cantidad de cambios radicales en la manera que consumimos y usamos los recursos naturales.
Lo que debemos hacer para parar la crisis
- Uno de los mensajes centrales que se sacaron del informe fue el uso de los combustibles fósiles. Para mantener el índice del calentamiento por debajo del 1,5 grados Celsius se necesita que las emisiones de CO₂ alcancen su punto máximo en 2025 y se reduzcan en un 43% para comienzos del 2030.
Este cambio es posible si el cambio va a generar energía sostenible como la eólica y la solar. El gran mensaje que quisieron comunicar es que se debe terminar con la era de los combustibles fósiles y se tiene que hacer de manera muy rápida antes de que estallen los indicadores.
- A medida que la crisis climática se intensifica, los investigadores se han visto obligados a reconsiderar el papel de la tecnología en la limitación y reducción de CO₂ en la atmósfera. Los científicos fueron muy claros en el informe, “No será posible mantener bajas las temperaturas sin algún tipo de técnicas de eliminación de carbono de la atmósfera, ya sea a través de árboles o de máquinas que extraigan CO₂”.
- Se debe frenar la demanda de energía por parte de los ciudadanos en transporte, alimentación y vivienda. Se sugiere intervenir sobre todo en el área alimenticia, incluyendo dietas en base de alimentos orgánicos, reducción en el desperdicio de alimentos y opciones que emitan menos carbono.
El IPCC considera que estos cambios podrían proveer sus servicios de un 40 – 70% mejorando el bienestar de las personas.
- Hay que cambiar la mentalidad de que ser sostenible o comprar productos sostenibles nos salen más costosos. Según BBC, el IPCC asegura que sigue fluyendo demasiado dinero hacia los combustibles fósiles y no hacia las soluciones climáticas de energías limpias.
El IPCC señala que los daños económicos por el cambio climático demuestran que el costo global de limitar el aumento en la temperatura a 2 grados Celsius durante estos años es menor que los beneficios financieros globales de reducir el calentamiento.
- Según el profesor Patrick Devine- Wright, uno de los autores principales del informe del IPCC, las personas de alto nivel socioeconómico son unas de las que más contribuyen al calentamiento global con sus producciones en masa y su consumo desmesurado, pero ellas mismas son las que tienen un alto potencial para reducir las emisiones manteniendo al mismo tiempo altos grados de bienes y una vida digna.
En pocas palabras, si ellas controlaran su consumo y consumieran de manera responsable, podrían contribuir con el ejemplo del net cero de carbono.
Una de las conclusiones que podemos sacar como comunidad ambiental después de recibir los análisis del IPCC es que debemos revisar nuestros consumos y ver cómo podemos reducir en su totalidad nuestro uso del carbón. Vivimos en una era digital, en la que podemos crear demasiadas alternativas ecológicas que nos ayuden a mitigar el calentamiento global.
Al final del día los científicos del IPCC podrán darnos todas las soluciones, pero depende de nosotros y de nuestro analizar en buscar o ver maneras de implementar medidas sostenibles en nuestras vidas para dejar un mejor planeta Tierra a la próxima generación.